Hoy no es un día cualquiera, es el día de los más pequeños y éste post va dedicado con todo mi cariño a ellos.
Para los adultos el tema sin gluten en nuestra vida social es complicado, no hace falta decir que en niños lo es mucho más. Hay que explicarles qué es el gluten, por qué no pueden comer esos alimentos y enseñarles algo que hasta a los mayores nos cuesta, la contaminación cruzada.
Más de una vez he escuchado a muchas supermamás con hijos celíacos su preocupación ante situaciones tan comunes como la celebración de cumpleaños.
Sí una comida familiar nos puede agobiar imaginaos una fiesta llena de peques tirando la comida, correteando por todo… Lo niños son niños y que sean celíacos no quiere decir que no puedan disfrutar de los cumples de sus compañeros.
Allí se juntan varios puntos importantes, la comida, la tarta y las bolsitas de chuches.
Cuando el establecimiento no dispone de menú para celíacos ellas llevan un tupper con todo lo necesario y adaptan a la perfección lo que los demás van a comer para que ellos se sientan uno más.
Pero lo mejor es ir a un sitio donde nuestros peques puedan comer como todos.
¡Mamás he encontrado un local que os va a encantar!